Judy - Rupert Goold (2019)

No sé explicar qué pasa con esta película. La historia no me parece sobresaliente; sin embargo, el resultado es una bomba emocional. Desde que vi el trailer me sorprendió ver a Renée Zellweger sumergida en la apariencia de otra persona. Es como si luciera mil veces más guapa de lo que ha lucido antes, como si sus ojos hubieran vuelto a ser tan limpios y puros como fueron en su personaje de Dorothy Boyd en Jerry Maguire (1996), como si me permitiera ver su soledad y su tristeza sin ninguna máscara, como si gritara por ayuda sabiendo que nadie puede escuchar. Así de real y  conmovedora resulta su mirada. Dan ganas de abrazarla, llenarla de besos y decirle que todo va a estar bien. No puedo resistirme a esa fragilidad, a esa presencia que llena toda la cinta. Incluso cuando está feliz se siente vulnerable como una herida abierta. Vuelvo a ver el corto y vuelvo a llorar. ¿Hay algo más que pueda mostrar una película? No quiero entrar en el asunto de si el argumento es esto o el otro, o si Judy Garland fue una buena persona o no, o si se parecía a este retrato o no. No quiero analizar si la infancia es la única patria o si el maltrato infantil es la peor forma de violencia.
Lo que dice Judy es más simple y más universal que eso. Su mensaje es tan evidente e inmenso que parece una verdad de perogrullo. Sin importar nuestro pasado o nuestras circunstancias, todos somos humanos, todos nos sentimos solos y tristes de vez en cuando. Todos necesitamos amor.  
La cinta muestra que siempre estamos solos, nacemos solos y morimos solos. Es imposible acompañar a nadie en lo profundo del alma. Solo podemos intentarlo y estar allí. La gente no sabe o no puede ayudar. El dolor ajeno espanta incluso más que el propio. El dolor y la desgracia no son contagiosos, pero nos desagradan. Si tenemos suerte, encontramos a alguien que nos acompañe. Judy parece conseguir ese contacto, esa compañía, solamente sobre el escenario y en ocasiones no puede estar en pie. 
Darcy Shaw que interpreta a la joven Judy Garland también tiene una mirada espectacular pero no tan frágil, no tan rota. La parte en que ella aparece es pura denuncia y justificación del personaje, es muy maniquea y por lo mismo poco interesante y poco profunda.

La música es increíble. Incluye: For Once in My LifeCome Rain or Come Shine, Get Happy y Over the Rainbow. Los vínculos que pongo son versiones con Judy Garland, no son las del filme, pero me parece necesario revisarlas. Puede ser que no sea la cinta más feliz del mundo, ni la mejor, pero tiene una fuerza muy especial y creo que vale la pena verla. (Ab.)

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