99 Homes - Ramin Bahrani (2014)
A pesar de que Andrew Garfield no es mi actor favorito y que Michael Shannon me parece muy feo. 99 Homes es una película que convence y te pone a pensar. Pueden verla en Netflix. La película nos muestra a un joven que vive con su madre y su hijo. Ellos están a nada de ser desalojados. Así como lo escuchan, en USA, en esa America que quiere ser great again, hay gente sin dinero y sin casa. El caso es que este pobre joven, de nombre Dennis Nash (Garfield), es sacado con todo y chivas a la banqueta en compañía de su madre Lynn (Laura Dern). Al desalojo acude Rick Carver (Shannon) como empresario inmobiliario rodeado de una pandilla de vagos que roban la herramienta de Dennis. Para colmo, el hijo de Dennis, un chavito odioso de unos diez años, regresa de la primaria mientras están botando sus cosas a la calle. Todos están abrumados. Suben lo que pueden a una camioneta y se van a vivir a un hotel. Pasado el mal trago, Dennis se da cuenta del robo y va a buscar a los vagos para pedirles sus herramientas. Se arman los chingadazos y aparece Rick para poner orden y mandarlos a trabajar. Dennis los sigue hasta la casa que deben arreglar, nadie quiere entrar porque han saboteado el drenaje. Eso sirve de pretexto para que Rick le ofrezca trabajo a Dennis e inicien una relación muy tensa.
La relación entre el patrón y el nuevo empleado sirve de pretexto para mostrar varias cosas: a) USA no tiene lugar para los débiles; b) la gente adquiere deudas innecesarias que no puede pagar; c) el negocio inmobiliario es capaz de cualquier cosa (robo, soborno, falsificación, etc.); d) la ambición pudre a cualquiera; e) los bancos son una mierda y f) la escuela de los niños gringos depende de la vivienda; si pierdes la casa, pierdes la escuela.
Conforme avanza la cinta, Dennis va aceptando más y más trabajo con tal de recuperar su casa. Se da cuenta de que las casas sólo suponen una carga afectiva para los pobres y se corrompe a cada paso. Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre al reino de los cielos. Aunque el Vaticano puede decir que la excepción es posible si compras indulgencias plenarias.
La moraleja: si vas a ser rata, intenta ser un canguro sin corazón, aspira a ser la rata más grande que se haya visto sobre la faz de la Tierra. Aunque el final me parece débil, vale la pena enterarse de las trampas del negocio inmobiliario que tanta gente sin casa dejó en Estados Unidos.
¿Qué significa ser bueno? ¿Qué significa ser un ganador? ¿Qué es más importante para ti? ¿De qué te avergüenzas? ¿Compartes el mismo sistema de valores que tu familia? ¿Cuál es tu lado flaco? ¿Quién te puede manipular? El peor enemigo siempre es uno mismo, y siempre se aloja entre nuestros pensamientos. (Ab.)
Si te gusto esta reseña que apunta con dedo flamígero al capitalismo, compártela con tu banquero.
¿Qué significa ser bueno? ¿Qué significa ser un ganador? ¿Qué es más importante para ti? ¿De qué te avergüenzas? ¿Compartes el mismo sistema de valores que tu familia? ¿Cuál es tu lado flaco? ¿Quién te puede manipular? El peor enemigo siempre es uno mismo, y siempre se aloja entre nuestros pensamientos. (Ab.)
Si te gusto esta reseña que apunta con dedo flamígero al capitalismo, compártela con tu banquero.
Comentarios
Publicar un comentario