Passengers - Morten Tyldum (2016)
PASAJEROS está en Netflix. Por alguna razón que no recuerdo, no vi esta película cuando pasó por los cines. Ayer, Netflix me la plantó en la nariz y acepté verla. Había escuchado que se trataba de un película tonta y me dispuse a ver un churro. La primera hora del filme fue mucho más de lo que esperaba. Quedé gratamente sorprendido al encontrar rostros agradables, una buena producción, muy buenas líneas y situaciones que me pusieron a pensar qué haría en esas circunstancias. También me sorprendió que el filme pudiera caminar tan ágil con sólo tres actores. Aunque después aparece un cuarto personaje y, al final, por un instante varios más. La historia es que una nave espacial viaja de la Tierra a otro planeta y lleva un montón de humanos congelados, suspendidos, en coma o algo así, para que no envejezcan. Nadie va despierto porque el traslado dura 120 años. Pero la nave pasa por una lluvia de asteroides y eso provoca una falla. Un mecánico de nombre Jim (Chris Pratt) se despierta. Pasa los días recorriendo la nave y buscando a alguien pero incluso la tripulación está suspendida. Jim descubre que le faltan 90 años de viaje y comienza a enloquecer, incluso piensa en suicidarse. La única interacción que tiene es la de Arthur (Michael Sheen), un androide que funge como cantinero. Esto evidentemente es un capricho del guión y carece de toda lógica, pero funciona. De hecho me recordó al cantinero Lloyd que atiende en El Resplandor (1980). Jim gracias a otro capricho del guión descubre a Aurora (Jennifer Lawrence), investiga todo sobre ella y decide despertarla.
Ya podrán deducir que estamos antes una versión postmoderna de Adán y Eva o de "Cerditos en el espacio" (The Muppets). Así que los cuestionamientos éticos se reproducen como conejos. La historia tiene un subidón, cuando la serpiente, perdón, el androide, le dice la verdad a Aurora. Imaginen el resto.
Hay algunas incongruencias obvias, por ejemplo: Jim encontró la manera de despertar a Aurora pero no pudo vencer a la maquina que le da el desayuno. Quizá sea un mensaje subliminal. Otra incongruencia, Aurora y Jim realizaron el mismo proceso de revisar la nave, pero sólo Jim descubre dónde están las rosas y los metales preciosos. Además, aunque Jim revisó todo el paraíso, perdón, la nave, sólo descubre la falla cuando resulta conveniente para la trama, con ayuda del también conveniente Gus (Laurence Fishburne). Como estos detalles hay otros, y serían irrelevantes si la cinta no traicionara su esencia y se convirtiera en un romance suicida.
En los últimos veinte minutos el filme se transforma en otra cosa. Pasa de cuestionar la libertad y la existencia, a señalar que todo se resuelve con amor. Salta de Adán y Eva a Romeo y Julieta. Morirán juntos pero felices. El guión quiso que descubrieran el valor de la vida en circunstancias adversas. Neta que ñoños somos los humanos, somos tan simplones que tener una pareja es lo máximo a lo que podemos aspirar. Ade más la película evita el incómodo tema del embarazo no deseado y los condones.
De cualquier manera, me divertí, pasé un buen rato, la película es muy relajada, no se toma muy en serio y te permite distraerte con detalles babosos como la ropa o descubrir si Jennifer es, o no, un bombón. Parece que sí pero de pronto no le encontraba la cintura. Por cierto, que feos zapatos usa.
Chris tiene esa sonrisa boba que resulta agradable y siempre se luce de buen humor. Siento que no actúa nada pero cae bien. La película está ideal para verla mientras cenas. (Ab.)
Si te gustó esta reseña que no confunde el amor con la calentura, compártela con tu crush.
Ya podrán deducir que estamos antes una versión postmoderna de Adán y Eva o de "Cerditos en el espacio" (The Muppets). Así que los cuestionamientos éticos se reproducen como conejos. La historia tiene un subidón, cuando la serpiente, perdón, el androide, le dice la verdad a Aurora. Imaginen el resto.
Hay algunas incongruencias obvias, por ejemplo: Jim encontró la manera de despertar a Aurora pero no pudo vencer a la maquina que le da el desayuno. Quizá sea un mensaje subliminal. Otra incongruencia, Aurora y Jim realizaron el mismo proceso de revisar la nave, pero sólo Jim descubre dónde están las rosas y los metales preciosos. Además, aunque Jim revisó todo el paraíso, perdón, la nave, sólo descubre la falla cuando resulta conveniente para la trama, con ayuda del también conveniente Gus (Laurence Fishburne). Como estos detalles hay otros, y serían irrelevantes si la cinta no traicionara su esencia y se convirtiera en un romance suicida.
En los últimos veinte minutos el filme se transforma en otra cosa. Pasa de cuestionar la libertad y la existencia, a señalar que todo se resuelve con amor. Salta de Adán y Eva a Romeo y Julieta. Morirán juntos pero felices. El guión quiso que descubrieran el valor de la vida en circunstancias adversas. Neta que ñoños somos los humanos, somos tan simplones que tener una pareja es lo máximo a lo que podemos aspirar. Ade más la película evita el incómodo tema del embarazo no deseado y los condones.
De cualquier manera, me divertí, pasé un buen rato, la película es muy relajada, no se toma muy en serio y te permite distraerte con detalles babosos como la ropa o descubrir si Jennifer es, o no, un bombón. Parece que sí pero de pronto no le encontraba la cintura. Por cierto, que feos zapatos usa.
Chris tiene esa sonrisa boba que resulta agradable y siempre se luce de buen humor. Siento que no actúa nada pero cae bien. La película está ideal para verla mientras cenas. (Ab.)
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