Anthony Joshua: The Road to Klitschko - Tim MacKenzie-Smith (2017)

Este documental, que puedes ver en YouTube, permite ver quién es Anthony Joshua. ¿Y a quién chingaos le importa? A  todos los que sabemos que Andy Ruiz Jr. venció a este boxeador el 1 de junio de 2019, para convertirse en campeón del mundo de peso pesado de cuatro organizaciones (Asociación Mundial de Boxeo, Federación Internacional de Boxeo, Organización Mundial de Boxeo y Organización Internacional de Boxeo). Andy, un gordito gringo de ascendencia mexicana, con apariencia de taquero pasado de tamales, dio la sorpresa y volverá a pelear con Anthony Joshua por esos títulos el próximo 7 de diciembre. Se dice fácil pero es un triunfo importantísimo y para poner en su justa medida el logro del Campeón Andy Ruiz es conveniente ver este documental. Desde antes de ser campeón, Anthony Joshua tenía un gran equipo detrás de él. Un montón de gente que cuida que el nene coma bien, gane dinero, haga ejercicio y luzca bello. Marcas como Under Armor lo utilizan como modelo y el tipo causa sensación a cualquier lado que va. De hecho, el documental parece más un promocional de la pelea entre Joshua y Vladímir Klichko que se realizó el 29 de abril de 2017, que un filme sobre box. 

El promocional muestra que Klichko, después de casi diez años como campeón, se sentía viejo y no quería irse dando mala impresión. Cabe señalar que ya había perdido los títulos y quería recuperarlos. Por lo tanto, armó la pelea con Joshua, que había asistido a cursos en su escuela de box y con quien tiene buena relación. Si lo vencía seguiría siendo el rey. Si perdía, sería ante uno de sus estudiantes y eso no sonaba mal.

El documental debería mostrarnos la gran preparación de Joshua para la pelea, pero en realidad nos muestra su gran carácter, su buen humor, quienes lo acompañan, las fotos que se toma y hasta un coche que regala. Si quieren ver cómo se prepara un boxeador, resulta más interesante y divertido ver Rocky (1976). Cotorrear con Dwayne Johnson, La Roca, no es preparase.

Entre las costuras, el documental deja ver que Joshua fue construido para ser un campeón por su sonrisa, su agradable apariencia, su porte y su musculatura. En otras palabras, parece campeón y quizá sea un atleta, pero tengo mis dudas sobre su capacidad para boxear. Las peleas que se muestran no impresionan a nadie y difícilmente duran dos rounds. Grandes gordos que se dejan pegar para ganar dinero, mientras Joshua pone cara de sorpresa y sonríe complacido.

Aunque el eslogan de Joshua es Stay Hungry, algo así como Quédate con hambre. Hambre de triunfo, supongo. Lo cierto, es que el tipo se nota acostumbrado a todas las comodidades. Ya no tiene esa hambre que Ruiz mostró en la pelea. Aflojó el paso porque está acostumbrado a ir a fiestas y filmar comerciales. El hambre que haya tenido de joven en Inglaterra, no se compara con la chinga de ser un obeso hijo de mexicanos en la frontera. Supongo que Joshua pensó que Ruiz era uno más de esos bultos que podría derrotar fácilmente. Sorpresa, sorpresa. Ruiz lo venció con claridad, aun cuando es mucho más bajo de estatura y su cuerpo muestra evidente sobrepeso.

Algunos piensan que Ruiz será triturado en el ring. Que Joshua no permitirá que lo derroten y recuperará los títulos. Creo que, salvo que logren un gran acuerdo económico, Ruiz demostrará de qué está hecho y acabará con la carrera de Joshua. Para que Joshua recupere su estatus necesita noquear a Ruiz. 

El comercial de casi una hora, muestra el día a día de una estrella de la televisión británica, pero es aburrido. Sólo sirvió para que confirmara mi confianza en el próximo triunfo de Andy Ruiz Jr. (Ab.)

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