Este filme, disponible en Netflix, requiere paciencia. Al inicio es puro caos, presenta a sus personajes dando por hecho que los conoces y salta de un asunto a otro como si fueras un experto en política exterior. No te desanimes. El título de la cinta hace referencia al último año de Obama como presidente y los personajes importantes básicamente son tres: 1) Barak Obama, el mundo conoce al único POTUS pop star; 2) La pelirroja Samantha Power, embajadora de Estados Unidos ante la ONU; y 3) Ben Rhodes, Asesor en Seguridad Nacional. En roles menos importantes dentro del filme están John Kerry, Secretario de Relaciones Exteriores y Susan Rice, también asesor en Seguridad Nacional. Estuve cerca de rendirme con el pretexto de mi ignorancia respecto de la grilla internacional y los hilos que la mueven. De hecho, me parece un trabajo imposible recolectar y analizar la información confiable (datos duros) que se requiere para tomar decisiones en cada conflicto internacional. Simplificar puede ser un camino que lleve a muy malos resultados.
Sin embargo, el punto de la película requiere no clavarse en cada uno de los temas que se abordan y sólo percibir el panorama general. En resumen, podría decirse que Obama y su gente saben que el mundo está a punto de estallar y hacen lo que pueden, o al menos eso creen, para evitarlo. El tiempo corre en contra y su poder disminuye con la elección en marcha.
El triunfo de Trump, ellos lo intuyen, cambiará las cosas radicalmente. El final es conocido por todos los que hemos trabajado en una oficina de gobierno. Recoges tus cosas en una caja y te vas sin que nadie te agradezca el esfuerzo que pusiste en tu chamba. No sólo eso, te vas apestado por ser de la otra administración.
Nada de eso es lo importante. El filme se calla todo lo que quieres oír y sólo te brinda algunas piezas con las que puedes explicar algunas cosas, por ejemplo: el misterioso COVID-19 que sugiere a la gente evitar el contagio del peor modo posible. De allí la genialidad acapulqueña de hacer una marcha para difundir el mensaje: Quédate en casa.
No quiero imponer a nadie mis conclusiones. Mira la cinta y conecta los puntos. El cambio de rumbo en los asuntos internacionales es inevitable. El Sheriff del pueblo decide que cada quien se arregle como pueda. Él sólo velará por sus intereses. Resulta muy conveniente que todos teman salir a la calle a protestar. (Ab.)
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