Verdens verste menneske - Joachim Trier (2021)
La peor persona del mundo es el mañoso título de venta de una película que comienza muy bien y después comienza a dar flojera hasta que resulta muy difícil mantenerse despierto. media hora menos hubiera sido ideal. Julie, la protagonista, es una mujer noruega de 30 años que pone demasiada atención a lo que dice la gente y se siente sin futuro. No sé si las noruegas de esa edad ya tienen que estar casadas y con hijos, cosa que me parece una tontería y un desperdicio, pero a Julie le pesa no haber encontrado el combo de carrera y pareja que la satisfaga. Julie está convencida de que encontrará al indicado y sigue buscando una actividad que la haga sentir plena. No lo logra, pero tiene tanta ganas que encuentra en Aksel, un dibujante de cómics, el hombre maduro que le brinda cierta seguridad y estatus mientras trabaja en una librería. Esa nueva situación trae nuevas presiones (casarse y tener hijos) que se vuelven insoportables.
La cinta muestra lo difícil que resulta para Julie aceptar que el plan de vida tradicional no es para ella. Y por eso se pone aburrida y reiterativa. "No quiero casarme ni tener hijos". Quizá para las mujeres, decir esto, es muy complicado.
Por otra parte, de manera innecesaria, se intenta justificar la personalidad de Julie. La cinta duda en afirmar si se debe a la mala relación que mantiene con su padre y apenas se atreve a sugerir que quizá sigue el ejemplo del divorcio.
Hoy es común escuchar que los traumas de la infancia nos moldean. Estoy seguro de que en algunos casos esa hipótesis es válida, pero también creo que hay gente que nace diferente y actúa siempre así. Drive My Car (2021), también nominada a mejor cinta extranjera, se acerca más a esa teoría. La realidad indica que las víctimas de circunstancias idénticas o similares pueden tomar actitudes radicalmente distintas.
El filme insiste en mostrar que Julie no sabe qué quiere y no se adapta al camino, como si todos debiéramos querer lo mismo, y lo hace tantas veces que el personaje parece tonto o malo. Julie da muchas explicaciones pero evade mencionar su insatisfacción y sus ganas de cumplir con lo que se espera de ella.
Julie no confía en sí misma. La duda es un error universal e inevitable. Hay una voz interior que repite "Éste no es tu camino" e intentamos callarla, esconderla, olvidarla cuando queremos pertenecer. Hacemos lo imposible por cumplir un plan que no es nuestro. Tarde o temprano, nos rendimos y entendemos que la sociedad es un castillo de cartas. Nada de lo que aparenta ser, es. La realidad es muy distinta a la versión socialmente aceptada. Mucha suerte tienen aquellos que encuentran la satisfacción en una sola cosa y a la primera. A otros nos lleva años encontrar la plenitud.
De cualquier modo, los últimos apartados de la cinta aburren mucho. Toda la vuelta con Aksel, sobra. Mención especial merece la buena música. Y sobre todo, es necesario subrayar que el final sería triste sin la versión de Art Garfunkel de la mejor canción del mundo: Águas de março. Es decir, gracias a la canción el final es feliz. (Ab.)
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