Kika - Pedro Almodóvar (1993)

Gracias a Netflix es fácil caer en la tentación de ver las películas de Almodóvar. Y al verlas, golpea muy fuerte notar lo rudas que eran sus cintas si las comparas con las más recientes. KIKA es cabrona y me sorprendió. Es una cinta provocadora que rompe tabúes con la mano en la cintura y  obliga a imaginar lo mal que lo habían pasado los españoles con Franco. Aquí todo es vida, todo se mueve, los personajes parecen no tener límites. La historia sigue a Kika, una maquillista que vive con peligrosa libertad y parece nunca pensar en el mañana o en las consecuencias de su actos. Pero lo mismo sucede con todos los personajes. Paul Vazo es un actor porno que escapa de la cárcel en un festejo de Semana Santa y que comete nuevos crímenes en su escape. Nicholas es un escritor extranjero capaz de matar a cualquiera, pero prefiere asesinar mujeres con quienes ha tenido relaciones sexuales. Andrea Caracortada es una reportera y presentadora de TV que tiene a los policías en su nómina y carece de toda ética profesional. Juana es una doméstica que permite que violen a su patrona. 

Todos los personajes tiene defectos graves que los acercan más a la delincuencia de lo que están dispuestos a reconocer. Quizá Kika sea la menos mala, pero es bastante boba. Aunque seguramente Ramón es el más idiota. En algún momento descubriremos que todo sucede por un objeto. Hay una maldición que es entregada a Kika. 

La película me parece adelantada a su tiempo. Hoy sería imposible filmar algo así sin generar una avalancha de rechazo. Pero no sólo la trama es vanguardista. El vestuario de Jean Paul Gaultier es alucinante, en especial el de Andrea Caracortada. La mezcla de humor y violencia con una puesta en escena teatral resulta surrealista.

El rojo dominante tan característico de Almodovár ya está en cada escena, con su respectivas pinceladas de verde. Victoria Abril cae un poco mal, pero está estupenda en su personaje. La protagonista, Verónica Forqué, tiene un carisma y un desparpajo inmensos. Nadie le roba la cinta. 

Este filme es un pedazo de historia cortado con hacha. Si tienes ganas de ponerte al límite, esta cinta tiene de todo, balazos, comedia, secretos, sexo, traición y muerte. No es para niños ni para persignados. Una joya de la incorrección política. (Ab.)

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