The Big Short - Adam McKay (2015)

The Big Short es un placer y un reto. Es la comedia más seria y más interesante que hayas visto nunca. Gracias a Vice (2018) el nombre de Adam McKay vuelve a ser nominado al Oscar y quizá por eso es necesario revisar La Gran Apuesta. El tema no es fácil y, aunque el director hace cosas maravillosas como hacer que Margot Robbie, Anthony Bourdain o Selena Gómez te expliquen algo, es sólo poniendo atención que entenderás y descubrirás la profundidad de esta gran película. No sé qué pretexto tengo para no haberla visto antes, es una cojera que Netflix me facilitó corregir. Si tienes libres un par de horas corre, enciende tu aparato electrónico y pon atención a esta obra maestra. No permitas que las frases ingeniosas o las tomas de contexto te distraigan, disfrútalas y sigue atento. Encuerar al sistema financiero y hacerte ver con absoluta claridad que está lleno de huecos, que tu dinero en el banco está tan inseguro como bajo tu colchón, es una gran bofetada que se recibe limpiamente sin mover el rostro. El castillo de naipes está construido sobre tu fe, tu capacidad de involucrarte en lo que no entiendes y en el optimismo idiota que nos infunde estar todos en el mismo barco. (¿Recuerdas el Fobaproa?)

Del mismo modo en que colocando un espejo frente a otro espejo se tiene la ilusión de crear un espacio infinito. Del mismo modo, tu dinero, ese papel que no puedes comer ni respirar, está dentro de una computadora generando más dinero. ¿Ya lo entendiste? ¿Puedes apreciar el tamaño del engaño del que formamos parte todos los que tenemos una cuenta bancaria? No es gratuito que el personaje judío de Steve Carell se distinga por buscar fallas en los libros supuestamente escritos por Dios. 

Yuval Noah Harari en su libro De animales a dioses nos dice: "...nunca convenceremos a un mono para que nos dé un plátano con la promesa de que después de morir tendrá un número ilimitado de bananas a su disposición en el cielo de los monos."

Y sin embargo, los humanos vivimos y depositamos nuestra confianza en una serie de mentiras evidentemente ridículas. Estamos hechos para creer, una y otra vez, en la buena fe de los otros. Este filme tiene la maestría de meter tu rostro hasta el fondo de la cloaca y darte todas las herramientas para que veas como funciona el mundo.

McKay no sólo te dice que el mundo es una mierda, además te brinda una puerta de escape, una que ya conoces y que no te gusta. Este hombre es un genio. Un inteligente y negrísimo sentido del humor recorre el filme. "La verdad es poesía y todo el mundo odia la poesía". 

La cereza en el pastel es usar a Brad Pitt, Ryan Gosling, Christian Bale, Marisa Tomei, Steve Carell y un montón de gente talentosa para hacerte pasar un rato agradable mientras deberías llorar una profunda decepción y sentir el peso del mundo sobre tus hombros. 

Este filme me recuerda a esa gente que, con un inmenso orgullo idiota, dice: "Haría cualquier cosa por sacar adelante a mis hijos". Yo pienso: eso haces, cualquier cosa. Cagas en el agua que les das de beber, envileces el mundo en que viven. Flaco favor te tendrán que agradecer. No te la pierdas por nada del mundo. (Ab.)