Hannah - Andrea Pallaoro (2017)
Hoy comenzó la 65 Muestra Internacional de Cine en la Cineteca Nacional y te recomiendo ver Las herederas (2018) de Marcelo Martinessi. Aunque esta reseña es de Hannah, menciono la otra cinta ya que la trama es muy semejante en ambas, aunque para mi gusto Las herederas es muy superior a Hannah por la simple razón de que no es pretenciosa. La película de Andrea Pallaoro inicia con treinta minutos de escenas sueltas súper aburridas. Estuve a nada de salirme pero la disciplina y la curiosidad me obligaron a quedarme. Lo que se puede ir descifrando de este montón de escenas, si antes no te vence el sueño, es que al esposo de esta mujer, la Hannah del título, lo encarcelan por haber abusado de su nieto. Dado que la mujer interpretada por Charlotte Rampling, siempre apoya a su marido, el hijo y la nuera deciden no volver a verla. Además, toda la ciudad sabe lo ocurrido y, por esa razón, le cancelan la membresía del club en dónde practica natación. Ella trabaja como mucama para una familia rica en la que es apreciada por tener una excelente razón con el niño de la casa. De ese modo nos hace saber el director que Hanna es inocente y no tiene certeza sobre la culpabilidad del esposo. La protagonista asiste a clases de actuación y al parecer ese es su único placer. Por un accidente, Hannah descubre un sobre. Aunque nunca se muestra el contenido, es posible deducir que contiene las fotografías que tomó su esposo al nieto cuando abusaba de él. Cierto, la película es inteligente y a partir de un discurso casi totalmente visual nos cuenta esta historia. Sin embargo, es simplemente aburrida. El modo de contar del director es tan engreído que desespera. La fotografía es muy oscura y la actuación de Charlotte Rampling es extraña, su personaje no genera ninguna empatía. Quizá ese sea un error de este filme. Charlotte tiene un rostro duro y por ello obtiene papeles de malvada como sucede en la serie Dexter o en el filme Red Sparrow.
Hay escenas absurdas que pretenden ser grandes alegorías por ejemplo: la secuencia de la clase actuación en la que los demás alumnos le aplauden por vaciar una bolsa de manera desesperada; y el final en el que la vemos descender muchas escaleras. Esas metáforas son obvias y superficiales, ni hablar de la de la ballena moribunda.
Lo mejor del filme es que hace que una hora y media parezca una eternidad. Si la ves por la noche será perfecta para ir a dormir. (Ab.)
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