La Belle et la Bête - Christophe Gans (2014)
“¿Mis regalos no te bastan? Me robas también lo más sagrado que tengo.”
–La bestia.
La Belle et la Bête es una película franco-alemana protagonizada por Vincent Cassel y Léa Seydoux, que cuenta la historia de Bella, una joven que decide sacrificarse por su padre al ir voluntariamente a los dominios de La bestia, un príncipe que fue maldecido y está obligado a esperar en su mundo, lleno de magia, secretos y criaturas extrañas, a que una joven lo ame a pesar de su apariencia. Recuerdo haber visto el póster en los cines, pero en ese entonces mi idea de La Bella y la Bestia venía con canciones como “Nuestro huésped sea usted”, personajes como Din Don o Lumière, y con una Bella castaña que usa un pomposo vestido amarillo; así que al no contar con esos elementos, taché a la película de mala y la olvidé. Ahora con un poco más de criterio, vi esta versión sin gran expectativa y vaya sorpresa que fue, en el buen sentido.
Su primer punto a favor son los efectos especiales. No digo que estén de diez, pero La bestia no me molesta tanto como la de Disney y los fondos son más pasables, algunos parecen reales o tan hermosos que desearías que lo fueran, además tienen unos perritos con ojos enormes que me provocaron más ternura que Chip. El otro punto que hace de esta versión superior es que, en Disney, toman prisionero al papá porque robó una rosa. Ajá, ¿y qué más? De acuerdo, aquí también el papá toma una rosa del jardín, pero la rosa es más que una excusa para que La bestia se desquite con el primer tonto que pasa de camino, tiene toda una historia detrás que conoceremos a lo largo de la película. No es sólo una rosa, y menos para La bestia que, con su justa razón, la ve como el más valioso de todos los tesoros que posee. Esta historia secundaria que tiene que ver con la rosa y el hechizo, me pareció el punto más fuerte y al mismo tiempo débil de la cinta. Es bueno porque al ser algo completamente diferente, me permitió valorar más el mundo que presentaban, con sus propias reglas y mitología, igual que le da a La bestia un motivo más coherente de porqué tiene un carácter de la chingada y por si fuera poco, muestra que su castigo fue más que “toma por mamón”.
Pero exactamente ese es el problema, la mitología, la magia no se explica, sólo se nombran seres en el momento más oportuno. Oh, claro, como ahora el príncipe tiene que transformarse, necesitamos que el público sepa de un ser divino superpoderoso que hasta ahora se menciona. No me gusta que la magia sea conveniente y menos que sea ilógica. ¿Esta divinidad que odia a La bestia, literalmente que lo maldijo mientras otro le pedía piedad, ayuda a Bella a llegar a él para salvarlo? Pero el pecado principal de esta historia secundaria, es que sentimos que la principal de Bella y Bestia pierde espacio. Mientras nosotro descubrimos junto a Bella el pasado y los secretos, no queda mucho tiempo para que ella conozca a La bestia de verdad, para que pasen tiempo o situaciones juntos que los hagan descubrir su amor mutuo de una forma más natural.
No es la película del año pero sí más coherente y bonita de ver (especialmente por el vestuario) que la producida por la casa del ratón, así que para mí, es la mejor versión live action del clásico de 1740. (Scarlet Oliva)
Comentarios
Publicar un comentario