Mignonnes - Maïmouna Doucouré (2020)
Cuties o Guapis está en Netflix y es la historia de una niña musulmana, de Senegal, que vive en Francia y está a días de tener su primer periodo. La madre está triste porque el padre contrajo matrimonio con una segunda esposa que pronto llegará a vivir con ellas. La niña se hace cargo de su hermano menor casi todo el tiempo y resiente la tristeza de su madre. La niña está fuera de su entorno natural y eso es un golpe a su estado de ánimo. Todo es nuevo pero todo es diferente y contrario los valores de su familia. Está enojada y triste. Para encausar esos sentimientos se une a un grupo de niñas de su escuela que viven una situación similar y que tienen un grupo de baile. La niña experimenta su nueva realidad de la peor manera. Comienza robando una baratija y después un teléfono celular. Miente, tiene secretos y busca manipular a la gente. Los niños necesitan guía. Quizá el filme es demasiado crudo, pero me parece realista. Niños que pasan el día solos mirando el internet, sin cariño ni cuidados, buscarán aprobación en las redes sociales y en extraños.
Un amigo me comentó del escándalo generado por esta película y después vi una reseña que se rasgaba las vestiduras por el modo en que se exhibía a menores de edad. Tuve que ver Guapis. El escándalos radica en que las protagonistas de la cinta son niñas de once años que se visten y bailan como teiboleras o edecanes de videos de reggaetón.
Opinan las buenas conciencias que la cinta las sexualiza. No creo que ninguna opinión sea 100% válida, nadie es dueño de la verdad. Lo que yo observé fue un grupo de niñas con padres ausentes que copian coreografías absurdas y hacen el ridículo, vistiéndose con ropa que muestra mucha piel.
Las niñas no lucen guapas ni sexys, lucen estúpidas. Si verlas logra despertar deseo en algún observador, hombre o mujer, debe solicitar ayuda psicológica. Los pasos de baile que realizan las niñas y que hoy son indispensables en los videos musicales, no son atractivos ni en mujeres de 23 años con buena fugura, mucho menos en niñas. Los movimientos son tan estúpidos y vulgares que si los hiciera mi pareja en mi casa en privado con lencería sexy me muero de risa.
Es cierto, parece inapropiado que las niñas bailen así. Pero ese es justo el punto del filme. El mundo miró a Shakira y la volvió famosa por su modo de moverse. Es lógico que las niñas copien ese modelo que los medios repiten. Son niñas abandonadas por sus padres, que imitan lo que ven. Monkey see, monkey do.
También es cierto que causa malestar ver lo que las niñas copian, pero ese es el mensaje. ¿Dónde están los padres? Si los niños siguen esos modelos es porque los padres no dan un ejemplo mejor. Yo ví una buena película, clara y contundente con un mensaje que no es nuevo. Si te excita ver bailar a estas niñas eres un pedófilo. (Ab.)
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