Pretty Woman - Garry Marshall (1990)

Mujer Bonita es un clásico. ¿Hay alguien que no la haya visto? Esta historia de la cenicienta moderna fue un éxito que causó profunda impresión en la mente de hombres y mujeres. Yo me enamoré de Julia Roberts y muchísimas mujeres de mi generación soñaban con Richard Gere. El pobre niño rico que no sabe conducir un automóvil va por la calle y se topa con una prostituta buena onda que se ofrece a conducir el Lotus y llevarlo a su hotel. Este encuentro casual les cambiará la vida. Vivian Ward encontrará razones para abandonar el oficio más antiguo del mundo y Edward Lewis descubrirá que es más interesante construir que destruir. La sociedad y su doble moral, representadas por el abogado Philip Stuckey y las vendedoras de una boutique, serán castigados por maltratar a la pobre Vivian. El amor lo puede todo, sobre todo si tienes una sonrisa hermosa como la de Julia, tienes un cuerpo esbelto, has aprendido algunos trucos, tienes buen corazón y te ayuda Héctor Elizondo. 
Por simplón que parezca, la historia nos vende la posibilidad de encontrar el amor verdadero y corregir el rumbo. ¿Quién no sueña con eso? La cinta refuerza los valores de la pareja tradicional. El hombre es un macho proveedor; y la mujer es una dama en la calle y una fiera en la cama. Yo creo que la iglesia católica patrocinó este proyecto. ¿Notaron la ausencia de gays y negros? ¿Notaron que los latinos somos buenos sirvientes? ¿Cuántas marcas famosas aparecen en pantalla? ¿Será que la diferencia entre una prostituta y una dama de la alta sociedad es sólo buena ropa y dinero? 
La canción Pretty Woman de Roy Orbison, que además brinda título al filme, es otro gran acierto. La música en general es buena. Julia Roberts consolidó su carrera, se volvió famosa y se dedicó a las comedias románticas. Richard Gere tomó un segundo aire. Héctor Elizondo lo hizo tan bien como educador de la chica salvaje que repetiría el personaje en El Diario de la Princesa (2001). Esta película es tan buena y tuvo tanto éxito que nueve años después Julia, Richard y Héctor se juntaron para hacer Runaway Bride (Novia fugitiva). 
Se vale soñar es el mensaje de esta película y por lo visto es un mensaje muy poderoso. Aunque para sacarse la lotería hay que lavar el boleto. Kit De Luca no aprendió nada de su colega y se fue directo al olvido. Si quieren revivir la magia y pasar un buen rato, búsquenla en Netflix. (Ab.)


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