A Star Is Born - Bradley Cooper (2018)

Nace una estrella es un muy buen filme que vale pena buscar en cartelera. A pesar de su título, la película no trata de cómo Ally se vuelve famosa, la historia central es la decadencia de Jack, interpretado por Bradley Cooper y sus intentos por recuperar el rumbo. No soy admirador de Lady Gaga ni de Bradley Cooper. Asistí con muchas dudas y salí muy satisfecho. Toda mi desconfianza fue eliminada en los primeros diez minutos. Bradley Cooper logra llevarte a un concierto y hacerte sentir toda la emoción del rock. Yo nunca asistí a un concierto de Jimmy Hendrix o Eric Clapton, pero imagino que sus presentaciones emanaban la magia que este filme logró en la primera canción. Se nota el gran cuidado que tuvieron en el sonido. Con unas cuantas estrofas regulares, la música se siente viva. Incluso, casi al final, cuando Jack (Bradley Cooper) toca la guitarra en Pretty Woman de Roy Orbison, la guitarra suena tan bien que te devuelve la fe en la humanidad.  

El concierto concluye, la estrella de rock sale del auditorio y, mientras lo llevan al hotel, se baja del auto en busca de un trago. Ya nos mostraron que además de talentoso es alcohólico. Entra a un bar con show travesti. La Gaga, Ally, que trabaja en un restaurant, canta en ese bar. Es la única mujer que actúa en ese sitio. Siempre pensé que la Lady parecía travesti y aquí me confirman que esa impresión no es equivocada. Aunque sabes que es una mujer,  no encuentras gran diferencia con sus compañeros. Su cuerpo es extraño, su rostro es extraño, pero su interpretación de La vie en rose es estupenda y cautiva a Jack.

El nivel de la película después de estos dos actos nunca vuelve a ser tan alto y al final uno se queda esperando otra actuación salvaje como las primeras. En el resto del filme hay otras canciones buenas, pero tan buenas, y también otras terribles.

Lo que atestiguamos es el romance de un alcohólico con una mujer ambiciosa. La Gaga aparece con la cara casi totalmente limpia y nos dice sin pudor que es fea y que siempre se lo han hecho saber. Pero cuando deja de ser una cantante con talento y se transforma en un producto musical, entonces luce tan mal que su esposo Jack se lo escupe en la cara.

Lady Gaga es una valiente, exorcista sus demonios a través de Ally y eso le da un matiz personal su actuación. Sin embargo, parece contenida, como si no quisiera opacar a Bradley o como si pensara así debe comportarse el personaje. No sé qué sucedió, esperaba verla explotar y sorprenderme  y tan sólo me hizo pensar que su capacidad como interprete es limitada. Canta maravilloso, pero siempre igual, siempre con los mismos trucos. Además cae un poco mal que traiciona su esencia para ganar más dinero.

No voy a esconder que lloré en más de una ocasión, la película es conmovedora. Mr. Cooper logró actuar y dirigir y se rodeo de una gran elenco: Sam Elliot, Anthony Ramos, Dave Chapelle, Michael D. Roberts, Barry Shabaka Henley y Michael Harney, además de Lady Gaga.

Aunque la película es muy buena, creo que si la hubiera tomado un director con más tablas habría logrado un poco más. Hay algunas escenas que duran demasiado y el final podría haber sido más contundente y entrañable con dueto previo al desenlace. Bien vale el boleto. No se la pierdan. (Ab.)