L'âge d'or - Luis Buñuel (1930)

La edad de oro está en YouTube. El término edad de oro proviene de la mitología griega y se refiere a una etapa inicial en la que los humanos vivían en un estado ideal. El hombre era un animal en armonía, un buen salvaje. En plan cristiano se refiere a Adán y Eva antes de probar el fruto del árbol del conocimiento. Sin embargo, para la película sería un título  irónico. La película comienza como un documental sobre escorpiones. Pero después muestra a un hombre en una isla, un desembarco y otras imágenes hasta llegar los protagonistas. Un hombre y una mujer se abrazan en el suelo y ella gime o grita o ambas, y la multitud se acerca para separarlos como a perros en celo. Aunque en su momento fue muy provocadora, hoy es difícil reconocer todos los detalles que molestaron al público. Hay escenas, como en la que los amantes insertan los dedos de la mano en la boca de su amado que siguen siendo tabú en el cine. Sin embargo, ver esqueletos vestidos con ropas eclesiásticas no parece ofensivo. Por otra parte, disparar a un niño que se porta mal, es muy divertido. Estoy seguro de que todos los profesores de primaria han tenido esa fantasía.

La película es tan extraña que aturde. No es el cine al que estamos acostumbrados. Su secuencia se interrumpe con detalles que parecen caprichosos. Las críticas al clero y la sociedad no mantiene el mismo nivel de claridad. Hay situaciones evidentes y otras que requieren análisis. 

No creo que esta sea la mejor película de Buñuel, pero supongo que sirvió como puente hacia la fama. Aunque le haya cerrado muchas puertas. La película dura una hora, es en blanco y negro y la calidad de la copia con subtítulos no es la mejor. A pesar de que hay pocos diálogos y mucha música. Es tan diferente a lo que se consume hoy que resulta difícil de ver y procesar. 

Hay una escena en que se muestra un cartel con las piernas de una mujer y no entendía la imagen, veía la cabeza de un pato, tuve que hacer un esfuerzo para descifrar la figura. Supongo que cada persona que se acerca al filme carga con sus pensamientos las imágenes.

En general, deduzco que todo es una burla a las barreras sociales impuestas al sexo. El coito es una actividad natural y placentera que se practica cotidianamente. Sin embargo, aunque sus efectos son públicos, la sociedad exige que se mantenga en privado. El sexo determina desde una mirada hasta los grandes espectaculares de ropa. Pero no es bien visto hablar de él en público.

El filme pregunta: ¿Una hija puede desear a un hombre que ha golpeado a su madre o lo desea por esa razón? ¿Una escultura clásica debe excitar? ¿Es arte o es un juguete sexual? ¿Qué grado de violencia es aceptable en una relación? La preguntas están allí. No es una cinta dominguera, pero verla es una especie de terapia. (Ab.)

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