Bliss - Mike Cahill (2021)

Amazon estrenó Bliss y es un filme mal calificado que por momentos confunde pero cuyo fondo resulta interesante. En Inception (2010) se entraba en otro mundo para plantar o robar ideas y al final era difícil distinguir los sueños de la realidad. Aquí la duda es si entras a una simulación para aprender a valorar lo que tienes; o si, impulsado por las drogas, has construido una fantasía sobre la realidad. A fin de cuentas, la dificultad es la misma. No hay certeza de cuál es la realidad y cuál la fantasía. En Inception había una motivación y un objetivo claro y práctico. En Bliss el objetivo es estúpido en ambos casos. Es decir, si estás en un mundo maravilloso y te has convertido en un cabrón odioso, no parece lógico que permitas a tu esposa intervenir tu cerebro para experimentar. Por el contrario, si eres un drogadicto que evade la realidad, la existencia de una hija que no te necesita no es motivación suficiente para vivir en la realidad. En mi opinión, la gracia de esta película es que ambas realidades parecen igualmente válidas. Las dos interpretaciones me parecen defendibles. Tontas, flojas, pero igual de estructuradas.

La cinta no convence. Por una parte, parece enfermiza la idea de ir a un mundo horrendo para valorar lo que tienes. Confío en que los humanos somos hedonistas y no nos gusta sufrir. Si fuese de otro modo nadie visitaría Tulum, todos visitarían Chalco. De igual modo, la idea de que las drogas te permitan alucinaciones tan perfectamente detalladas y placenteras, no me la compro.  

A esas objeciones se suma la extraña elección del elenco y la dirección de actores. Salma Hayek está muy exagerada. La peluca y la actitud son nefastas. Owen Wilson empeora el asunto al actuar tan pasmado. El contraste resulta insoportable. No digo que sea culpa de Salma, quizá es culpa del estereotipo que visualizó el director al contratarla. Sentí que Salma intentaba imitar a Sofía Vergara pero con acento mexicano.

Al final se opta por la salida cursi. Quedarse en el mundo feo, porque te importa más tu hija que tu pareja. El padre se rehabilitará para recuperar a su niña. Siento que quisieron llegarle al público latino que ve telenovelas. 

Al final la película falla porque no hay conexión con los personajes. No soy un drogadicto sin casa, ni soy un magnate inconforme con una casa de ensueño y un esposa cabrona. Si eres mujer, pasa lo mismo; no eres una prostituta adicta que vive en una choza, ni eres la científica loca con complejo de inferioridad que juega con el cerebro de su marido.

Lo más rescatable de la película son las locaciones en Coacia y  la compatibilidad de los elementos en ambas versiones de la realidad. Es decir, los objetos son sustituidos por otros con la misma distribución de modo que puedas encontrar sus equivalentes. No me gustó pero tampoco está pa'l perro. Palomera.  (Ab.)

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