Fractured - Brad Anderson (2019)
Fractured está en Netflix. Esta cinta no engaña a nadie, lo intenta pero no lo logra. Desde el inicio da pistas claras de lo que sucede. Sin embargo, me gustó porque refleja con mucha claridad la experiencia de asistir al IMSS o al ISSSTE en busca de atención médica de urgencia. Me pregunto si el INEGI tiene información sobre la cantidad de personas que mueren esperando ser atendidas y de las que deciden irse a buscar atención a otro lado. Cuando era niño pasaba mucho tiempo en clínicas y hospitales, siempre las odié. No sólo por el olor que emanan sus construcciones también por su iluminación fría y deprimente. Obvio juega en contra que te sientes mal o que alguien de tu familia se siente mal. Pero las sillas de la sala de espera son una tortura y, en ocasiones, dan asco. Si a eso sumas la batalla por los datos de pago cuando no tienes seguro, el infierno está completo. Si como paciente es un horror, como familiar es casi lo mismo. No puedes obligar a un médico a que atienda a tu familiar y una vez ocurrido el milagro estar afuera esperando sin noticias es desesperante. Dan ganas de asesinar a alguien, pero eso no cura a tu enfermo.
La cinta se mete en la piel, emociona, encabrona. Aunque sabes quién es el loco, no puedes evitar estar de su lado. La sensación de que la realidad es frágil y que una organización creada para hacer el bien puede joderte la vida para siempre es real.
Recientemente Fernanda Solorzano en Cine Aparte reseñó la cinta peruana Canción sin nombre (2019). No me he animado a verla pero creo que hay similitudes importantes con este filme, en el sentido de que un hospital es el escenario de una pesadilla real.
El colmo del asunto es que, a pesar de la existencia de cámaras en espacios públicos, siempre hay un punto ciego y manipulación de la información registrada. Las grabaciones nunca son concluyentes, basta ver el desempeño de los árbitros y el VAR en el futbol.
El dato inútil es que Lily Rabe luce guapa en el poco tiempo en pantalla que tiene. Esta cinta es para ver el domingo, en el sillón de tu casa, con botana y cerveza, si no tienes familiares enfermos. De lo contrario, terminarás odiándola y con muchas malas ideas. Por cierto, ¿Ya pensaste si te vas a vacunar contra el COVID? (Ab.)
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