Mr. Brooks - Bruce A. Evans (2007)

MR. BROOKS, disponible en Netflix, tiene el privilegio de contar con Demi Moore y es una tristeza que tenga tan poco tiempo en pantalla. La cinta trata sobre Mr. Brooks, un empresario exitoso, que tiene como hobby matar. La gracia está en que se reconoce como adicto y asiste a las juntas de alcohólicos anónimos para intentar detenerse. Su deseo de matar es tan fuerte que tiene una personalidad propia, es una especie de amigo imaginario que lo acompaña y ayuda. Por otra parte, su más reciente asesinato tuvo la mala fortuna de ser capturado por un aficionado a la fotografía. Este atento testigo no quiere dinero por su silencio, busca formar parte de la experiencia, quiere matar. Así que se genera una lucha de poder entre el asesino experimentado y el novato. Al tiempo, Demi se está divorciando de un restaurantero cabrón que quiere arrancarle unos cuantos millones de dólares. Ella es una niña rica que decidió ser policía y se ha convertido en una detective famosa. 

La historia es fácil de seguir, ágil y divertida. Todos los personajes tiene su lado flaco y eso permite observar al ser humano en su expresión más fascinante: la irracional. ¿Qué preocupaciones viven en los pensamientos de un asesino serial?

Resulta que la familia es fuente inagotable de problemas, mientras Mr. Brooks debe solucionar las bobadas de su hija, la detective debe arreglar su separación. Ellos saben lo que quieren y deben hacer, pero sus actividades se ven interrumpidas por las locuras de esas personas que deberían significar alegrías, al menos en teoría.

Lo mejor de la cinta es que Mr. Brooks es un genio del ganar ganar. Por eso es un buen empresario. Este hombre maduro y prudente, como padre afectuoso que es, sabe que para solucionar sus problemas debe solucionar los de otros. Así que que pone manos a la obra y el resultado es un éxito total.

Nuevamente el patriarcado se convierte en el héroe y rescata a las mujeres a su alrededor. No lo hace para humillarlas, lo hace de buena fe y porque sirve a su paz mental. Este hombre es el ejemplo del sabio que no espera a que todos fallen, y dedica su tiempo a hacer de este un mundo mejor. Pocas cintas dejan tanta satisfacción como ésta. (Ab.)

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