The Sting - George Roy Hill (1973)
Ladrón que roba a ladrón tiene mil años de perdón. El Golpe es una de esas películas que debes reconocer por la música. Cuando yo era niño, todo conmutador respetable sonaba la tonada de la cinta para dejarte esperando. Por si no la conocen, lo dudo, les dejo el enlace con la rola aquí. Sinceramente nunca entendí la fascinación con la música, supongo que porque no había visto el filme. Esta película era un blockbuster antes de que el término se inventara. Unía el talento de los galanes de Hollywood, Robert Redford y Paul Newman, que ya había trabajado juntos con buenos resultados en Butch Cassidy and the Sundance Kid (1969). Además nos contaba la historia de una venganza súper elaborada.
Esta cinta me parece muy relevante, porque hay gente que se burla de las teorías de la conspiración, sin tomar en cuenta que hay organizaciones delictivas bien organizadas como la que se muestra en la cinta. Obviamente también existen otras organizaciones legales como los estudios de cine que arman una gran puesta en escena para sacar un poco de dinero de tus bolsillos y otras organizaciones que llamamos gobiernos que también se hacen con la mitad de tu plata.
Aunque las escalas son diferentes, esas escalas son las que han permitido al ser humano ser la terrible enfermedad que devora el planeta. Sin esa capacidad para organizar grupos, sin necesidad de obtener el consentimiento expreso de cada uno de los individuos, los humanos seguiríamos viviendo en árboles y matándonos por fruta.
La película muestra con gracia estas escalas al mostrar la evolución del personaje de Redford. El tipo inicia trabajando con dos personas y termina trabajando con 50 o más, algunas que ni conoce. Es imposible pasar por alto que la elaboración del filme requirió muchas personas. Así que si bien la historia de la venganza es divertida, es mucho más educativo observar el trabajo en equipo que requiere la estafa. Un detalle importante, es que al final, incluso quienes están trabajando para evitar la estafa, cooperan para que salga bien. Es decir, un buen mecanismo social debe estar tan bien armado, que incluso en contra de tu voluntad, el engaño te obligue a ser parte importante de la trama. Teniendo eso en mente, vean la cintaY luego revisen algunas teorías de esas que llaman conspiranoicas. (Ab.)
Si te gustó esta reseña paranoica, compártela con un amigo.
Comentarios
Publicar un comentario