Calzonzin inspector - Alfonso Arau (1974)
Calzonzin inspector está en YouTube. La crítica al sistema político mexicano tiene una larga historia y ha tenido siempre buen nivel, por eso han sobrevivido al paso del tiempo las caricaturas que los diarios publicaban sobre Benito Juárez y Porfirio Díaz. Evidentemente, no se ha logrado cambiar el sistema y los críticos han sufrido algunos reveses, pero cuando menos se han denunciado los abusos. En cine fue famoso el caso de La sombra del caudillo (1960) dirigida por Julio Bracho que permaneció enlatada 30 años. Calzonzin inspector se inscribe en ese género y es el antecedente más obvio de la Ley de Herodes (1999). Aunque el humor es muy diferente ya que Arau incluyó un humor de pastelazo de diluye y distrae de la crítica dura. La película está basada en la historieta de Los Supermachos de Rius (Eduardo García del Río) que localiza y exhibe las prácticas políticas famosas en en este país. El sistema ha tenido siempre las mismas patas: la Iglesia, la fuerza represora (ejército/policía) y los favorecidos por el régimen (latifundistas, comerciantes, periodistas y extranjeros). Quienes pagan el pato son en su mayoría población de origen indígena dedicada a la agricultura y otros tantos inadaptados que todavía piensan que el país puede y debe mejorar.
La historia comienza con un mitin indígena que es interrumpido por los balazos del equipo del cacique local. Un par de hombres en sus treintas, Calzonzín y Chon, indígena y mestizo, escapan de los matones en una avioneta y caen en el pueblo de San Garabato. Allí son confundidos con un inspector enviado por el gobernador.
Para que no descubra la verdadera condición del pueblo, el inspector es recibido con gran fiesta y los favorecidos entregan sobornos no solicitados. Los regalos no son sólo dinero, también hay bebidas, banquetes y mujeres. Además, el presidente municipal, Don Perpetuo, ordena que los enfermos del hospital, los reos y los guardias de la prisión sean sustituidos por hombres sanos presentables.
Cuando era niño, en los setenta, era posible saber que el presidente haría un recorrido por la colonia cuando se pintaban banquetas y bardas, se barría a consciencia la calle y se arreglaban las luminarias. Lo peor del asunto es que pasada la visita, los mejoras que era posible remover desaparecían. La farsa era descarada y no creo que el presidente pudiera tragarse tanta tontería, aunque seguramente no le importaba.
Caltzonzin aprovecha todo lo que puede e incluso usa parte del dinero para sacar a un periodista de la cárcel pero la farsa se descubre y es capturado. Me sorprendió que Carmen Salinas aparezca joven en la cinta. Un detalle curioso es que el nombre Caltzonzin o Canzonci es una palabra utilizada para referirse a la máxima autoridad Purépecha. Además de ser un pueblo en Uruapan. (Ab.)
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