Irréversible - Gaspar Noé (2002)
Irreversible es una bomba. Esta cinta contada de adelante hacia atrás es una maravilla que juega con las emociones. Es cierto que al inicio resulta desagradable y que cuesta trabajo descifrar hacia dónde va; pero si superas el mareo y el zumbido y comienzas a armar el rompecabezas, estarás atrapado y deberías prepararte para ser demolido. Tienes que poner atención y ver esta cinta al menos dos veces. Es una cinta que requiere esfuerzo y que, aunque la odies, deberías ver. Ya sé que nadie entra al cine dispuesto a ser destruido y que todos queremos pasar un rato agradable, pero cuando menos una vez en la vida es necesario mirar la violencia real a los ojos y yo prefiero verla en el cine. Es una fábula sobre la toma de malas decisiones. Es caperucita ingresado a lo más profundo del bosque para ser devorada. Es el cazador matando a palos a un inocente. Es el gemelo idiota del leñador rogando por ser lastimado. El lobo hace lo suyo y se pone a mirar la ola de destrucción que sus actos han impulsado.
La vida que damos como segura puede cambiar por completo de un día para otro, en una hora, en un minuto. La bola de nieve siempre desciende y aunque a veces se topa con una roca, en ocasiones crece sin control hasta llegar al valle.
Ninguna otra cinta podrá hacerte sentir lo que Irreversible. Tan sólo por eso, deberías hacer el esfuerzo de encontrar y ver esta cinta tejida a mano con detalles sutiles. Creo que Gaspar Noé ha intentado replicar lo que logró en esta cinta, pero Climax (2018) es apenas una sombra de aquella.
El coqueteo con el determinismo es difícil de captar a la primera, pero si vuelves al filme y lo detectas resulta aterrador. Esta es para mí la verdadera y única cinta de terror de la historia del cine porque atenta contra mi futuro a pesar de que no me identifico con ninguno de los personajes. Una obra maestra. (Ab.)
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