¿Será Puertas abiertas
la peor película de terror de la historia? Inicia conforme a la receta
tradicional mostrando una vida cotidiana de armonía que se ve afectada por un
hecho extraordinario. La muerte del padre cumple la función de alterar el orden
establecido y sacar a los personajes de la zona de confort. Sin ingresos,
esposa e hijo aceptan mudarse a la casa de campo de la hermana de la viuda. La
casa es enorme, no las más bonita ni la más moderna, y aunque cualquiera la
quisiera para pasar un mes de vacaciones en la mitad del bosque, tiene un sótano
extraño.
Desde antes de que lleguen a su destino, comienzan a pasar
cosas extrañas, que no son extrañas para el espectador, sino para los
personajes. El espectador puede ver que hay alguien dentro de la casa y todo lo
que sucede es provocado por él. Una mujer que parece estar loca aparece por
aquí y por allá sin que su presencia tenga sentido. Lo más revelador es que la
vieja asegura que la muerte suele ponerse necia y perseguir a la gente.
Madre e hijo comienzan a sentirse amenazados y pelean entre
sí. Para no errar en los clichés, el primer muerto es un joven negro con buenas
y sospechosas intenciones, que pretende ayudar a los recién llegados. No vemos
gran cosa, nada se explica, no conocemos al asesino ni sus razones. Después de
mucho tiempo de aburrición, la película se apresura y mata a los protagonistas.
No la vean por nada del mundo. No pierdan su tiempo, no la busquen en Netflix.
(Ab.)
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