Suburbicon - George Clooney (2017)

Suburbicon: Bienvenidos al paraíso es una buena comedia con el sentido del humor oscuro, del guión de los hermanos Joel y Ethan Coen, muy al estilo de Fargo (1996). 

George Clooney confía mucho en su amigo Matt Damon y lo invitó a hacer el protagónico en este filme. Aunque ya dio el viejazo y parece todo un don, se agradece que Mr. Damon se aleje de su estereotipo de bueno con este personaje. 

Julianne Moore se ve muy viejita. Una viejita muy guapa y buena actriz que recibe nalgadas con raqueta de ping pong. Hay una diferencia de casi diez años entre ellos que no molesta. Alex Hassell y Karimah Westbrook roban cámara con tan sólo unos segundos de participación. 

El avance de esta cinta me engañó por completo. Imaginé que vería a un hombre bueno tomar medidas desesperadas para salvar a su familia de la mafia. Pensé que se trataba de una película alocada. No acerté ni de lejos.

Se trata de un filme que comienza muy serio porque todo lo que pasa en pantalla podría suceder fuera de ella. La crítica al racismo y a la administración Trump es evidente. Los blancos protestantes son el origen de todos los males. 

Son —yo no soy caucásico ni cristiano ni gringo— una plaga con ideas extrañas sobre el deber ser. Su moral los acorrala y los destruye. Cualquier parecido con los mochos mexicanos es pura coincidencia. Claro, es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio.

Todo va adquiriendo sentido lentamente y el final es maravilloso. El mensaje es claro, los humanos somos salvajes, somos simios irracionales y por eso todos somos vulnerables. Un par de niños tendrán que perder la inocencia de la peor manera posible y después seguir creyendo en el futuro. La vida tal cual es. Vale la pena. (Ab.)