Slava - Kristina Grozeva & Petar Valchanov (2017)

Hoy viernes empieza la Muestra Internacional de Cine edición 63 en la Cineteca Nacional. La muestra trae catorce filmes, entre ellos Un minuto de Gloria. El título Slava, significa “gloria” en búlgaro y alude a la marca del reloj de pulsera de su protagonista.

A los directores les gusta mostrar lo difícil que resulta ser honesto en Bulgaria. Su anterior película, La lección (2014) ponía prueba a una maestra y ahora lo hacen con un guardavía. En este filme se apoyan en los actores Margita Gosheva y Stefan Denolyubov, con quienes también trabajaron en La lección.

La trama es muy simple, Tsanko Petrov, un guardavía tartamudo, de cincuenta años o más, se encuentra un morral con dinero en las vías del tren. En contra del sentido común, en un país con problemas de corrupción, Tsanko entrega el dinero a las autoridades. 

Por lo visto, Bulgaria se parece mucho a México, de modo que su honestidad no quedará impune. Lo premian con la intención de restar atención a un escándalo. Él se deja llevar y se pierde en las complejidades del trato social y la burocracia. 

Lentamente, la premiación se convierte en un conflicto y, cuando intenta ejercer presión sobre los poderosos, su honestidad termina por volverse en su contra.

Merece mención especial la excelente actuación de Margita Gosheva. En La lección, interpretó a una maestra y en esta ocasión interpreta a la engreída y prepotente jefa de relaciones públicas del Ministerio de Transportes. Aunque en ambos roles es una mujer fuerte y con iniciativa, los ejecuta tan bien que no pude reconocerla. 

En este caso su trabajo es tan convincente que la vas a odiar. Algo semejante sucede con el trabajo de Stefan Denolyubov. En La lección era un prestamista cabrón y ahora es un hombre roto. El final es tan bueno que no puedo decir nada más. Búsquenla, vale la pena. (Ab.)