Knox Goes Away - Michael Keaton (2023)
La cinta tiene la buena vibra de lo relajado, aunque la historia se centra en la urgencia. Xavier Crane (Al Pacino), jefe y amigo de Knox, le ayudará a vender las cosas para que el dinero llegue a sus herederos. Pero Xavier es la viva imagen de la relajación, mira programas de animales salvajes en TV, toma baños de tina, bebe y come con calma.
Miles busca a su padre después de haber asesinado de 17 puñaladas al violador de su hija. Y John dedica sus últimos días de consciencia a montar un teatro para que su hijo no vaya a prisión. Pero, como en las buenas historias, los otros personajes también están vivos y hacen cosas que afectan el plan de John.
Es cierto que el tufo de telenovela del padre sacrificado está presente, pero la cercanía de la muerte es un tema que cambia el tono. Los días de Knox están contados y no es lo mismo sacrificar toda tu vida (aunque nunca sepas cuánto durará) que sacrificar un mes o dos de consciencia intermitente.
Quizá lo más decepcionante de la historia es que olvida que John tendría que ser juzgado como un incapaz, de modo que su ex y su hijo podrían invertir parte de la herencia en su defensa haciendo que el juicio se prolongue pos meses. Por lo tanto, el final es simplemente absurdo.
A pesar de los defectos, la cinta engancha porque Pacino y Keaton conocen su oficio. Por una parte es imposible sentir odio por John y por otra, me causa infinita ternura ver a Pacino como un bebe dedicado a comer y ver TV con una esposa mucho más joven diciendo en más de una ocasión que es un ladrón. La película no es una maravilla pero es mejor que Furiosa (2024), Joker 2 (2024), Bettlejuice 2 (2024) y Deadpool & Wolverine (2024) juntas. (Ab.)
Si te gustó esta reseña, compártela antes de que te duela la pinche crepa de acordarte de mi.
Comentarios
Publicar un comentario