Monster Trucks - Chris Wedge (2016)

Monster Trucks es un muy buen producto de entretenimiento familiar que puedes ver en Netflix. Quizá por lo engañoso del título; por la poca personalidad del protagonista, Lucas Till; o incluso tal vez por señalar a las petroleras como compañías sin escrúpulos capaces de matar cualquier especie, este buen filme no ha recibido mucha atención. Evidentemente tiene defectos, pero los compensa con una premisa creativa. La historia es la siguiente: Una compañía petrolera está perforando el subsuelo y en su avance se topa con agua. Si se continua perforando hasta llegar al petróleo se contaminará el agua. ¿Lo lógico es detenerse? Eso depende de tus intereses. La perforación avanza y al tocar el agua tres seres subterráneos son expulsados hacia la superficie. Este hecho carece de mayor explicación. El caso es que dos de los tres bichos son capturados, mientras que el tercero escapa. Un joven sin carisma se encontrará con el monstruo y se hará su amigo. ¿Alguien más está pensando en E.T. the Extra-Terrestrial (1982)? Cierto, se parece. Pero es muy diferente. 

El resto del filme es la búsqueda y rescate de los otros dos inteligentes y amigables monstruos que con sus tentáculos sirven como motor a las camionetas del título. Curiosamente, los seres subterráneos comen petróleo y pueden tragar gasolina sin enfermarse. Esa característica los convierte en principales enemigos de las siete hermanas.

Yo esperaba ver al joven convertirse en campeón de un torneo de Monster Trucks. Esa expectativa no se cumplió. El asunto es que el filme debe haber costado una buena cantidad de dinero y su espíritu ochentero es revelado  destruyendo coches. 

El mensaje ecologista no se siente pesado, pero le falta algo. Si yo fuera niño, la idea de que existan especies animales no descubiertas me hubiera fascinado. Quizá ahora los pequeños psicopatías están más interesados en un teléfono inteligente que en una mascota. 

A pesar de algunos huecos, la película me pareció buena.  Entretenimiento ligero y divertido para todas las edades. Además tiene mensaje y tiene un punto en contra de las petroleras. Mucho mejor que Toy Story 4. (Ab.)