30 Minutes or Less - Ruben Fleischer (2011)
30 minutos o menos está en Netflix y si bien es una comedia intrascendente sobre un estúpido plan para obtener una herencia, entrega más de lo que promete. La historia es la siguiente: Un hombre que tiene una relación de clóset con su mejor amigo, sueña con matar a su padre para obtener dos millones de dólares antes de que el tipo se acabe los 8 millones que ganó en la lotería. Arman un chaleco con explosivos que colocan en un repartidor de pizza para obligarlo a robar un banco. Sólo necesitan cien mil para pagar al asesino. Las cosas no salen conforme a lo planeado y las situaciones van empujando a que todo se vaya al carajo. La película no pretende otra cosa que entretener y apenas recupero lo invertido, pero el guión es suficientemente ingenioso. Los últimos veinte minutos funcionan perfecto e incluso el ajonjolí de todos los moles, Michael Peña, resulta gracioso.
Lo mejor del filme comienza cuando roban el banco. Allí todo despega, agarra ritmo, se va para arriba y termina con un buen final. Sin embargo, el tiempo que tarda en llegar a este punto es algo pesado y es posible que te desesperes antes. Disfruté mucho la persecución y los choques. Me hizo recordar las películas de los ochentas en las que todo era destrucción. Además, las mascarás de simios me recuerdan el video de Bruno Mars de Lazy Song que salió ese mismo año.
Por otra parte, no hay química entre Aziz Ansari y Jesse Eisenberg, todo luce sucio y los malos (Danny McBride y Nick Swardson) son muy viejos y desagradables. Insisto, es ingeniosa pero hay algo en la realización que se siente de mala calidad.
De cualquier manera, se queda corta comparada con la película anterior Zombieland (2009) en la que el director trabajó con Jesse, Emma Stone y Woody Harrelson.
Jesse repite en este filme. Emma en Gangster Squad (2013) Y Woody Harrelson repite en Venom (2018) que no vi pero que recibió muy malas críticas. Los tres repetirán en Zombieland 2: Double Tap que está programada para estrenarse en este año. Supongo que cree que alguno de ellos es su amuleto.
De lo anterior es posible deducir: a) los estudios le tienen confianza (Venom fue un gran negocio); b) ha ido cuesta abajo en cuanto a calidad; y c) quizá reuniendo al mismo elenco que tuvo en Zombieland recupere la confianza y nos entregue un buen producto. Los cortos muestran algo interesante y divertido pero creo que ésta será la prueba de fuego para el director. Corrige el rumbo y logra un éxito total o termina de hundir el barco. Mientras tanto creo que resulta interesante revisar sus trabajos anteriores y notar qué ha conservado y qué ha perdido en el camino. (Ab.)
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