Le grand bain - Gilles Lellouche (2018)

Hombres al agua está en Netflix y es una excelente comedia, muy divertida y muy bien armada. Es posible verla sólo por encima y pasar un rato agradable o clavarse en la textura y analizar todas las pistas. El filme trata sobre un grupo de hombres y un par de mujeres que atraviesan tiempos difíciles o quizá décadas difíciles, por no encontrar su lugar en el mundo. Eso cambia cuando se trazan un objetivo y trabajan para conseguirlo. La meta del grupo es participar en una competencia internacional de nado sincronizado. Ese deporte, aunque menospreciado por muchos, es el camino que les hará salir de la depresión.  La historia, aunque cae en algunos clichés, es entrañable. Cada personaje tiene un conflicto bien definido que debe superar. Todos tienen una contraparte a la que desean convencer de que son ganadores y para hacerlo necesitan convencerse a sí mismos. Con eso sería suficiente para recomendar el filme. Pero hay más. La historia que presenta sirve para reflexionar sobre nuestro estado emocional, nuestra relación con la familia y nuestros objetivos en la vida. 

En estos días, parece insuficiente llevar una vida tranquila y agradable. El grueso de la población considera que el objetivo es tener mucho dinero y comprar todo tipo de cosas inútiles. Dividimos a las personas en ganadores y perdedores. No basta tener un empleo estable, sólo los ganadores tienen derecho a ser felices.  

¿Quién es un ganador? ¿Cómo se obtiene la felicidad o la paz mental?  Esa es la línea profunda de esta comedia. Los personajes, casi por casualidad, encuentran un camino poco transitado para convertirse en ganadores y recuperar la confianza perdida. 

En la película resulta muy claro que la gente que rodea a las personas deprimidas son parte del problema y en ocasiones su afecto resulta nocivo. Las expectativas de quienes nos rodean en muchas ocasiones son parte del problema. Incluso nuestras expectativas poco realistas son parte del problema. 

Cada vez que escucho que el capitalismo es la única opción viable para que la sociedad funcione, pienso que toda mi vida he vivido en un sistema capitalista y no estoy seguro de que esté funcionando correctamente. Es verdad que tener un trabajo y ganar dinero en la mayoría de los casos hace que las personas se sientan satisfechas, pero eso no siempre es así. Hay otros que soportan trabajos horribles por necesidad. Incluso hay ganadores que se suicidan. 

Para el capitalismo, el bienestar emocional de la población es irrelevante. Se trata de un sistema totalitario que rechaza a quienes no encuentran una tarea redituable dentro del sistema. Incluso aquell os que encuentran un espacio, en cualquier momento pueden perderlo y ser rechazados. El filme muestra que es necesario un espacio para todos, incluidos aquellos que pasan un mal momento. No se trata de rechazar el capitalismo, se trata de ser humanos y de que toda persona sea integrada y tenga la oportunidad de sentirse satisfecha aunque su actividad no genere una riqueza evidente o fácilmente comercializable. ¿Para qué sirve el deporte? ¿Para qué sirve el arte? Pueden o no integrarse al sistema económico y pueden o no generar riqueza, pero sobre todo generan satisfacción y felicidad. Y eso es lo más importante. 

Esta cinta me recordó un video en que un joven pregunta a un gurú cómo encontrar a su pareja ideal. El gurú le dice que tal cosa no existe. Nadie nació para completarte. Nadie está diseñado para ti. Es el compromiso lo que hace que una pareja funcione. Para ejemplificar el gurú cuenta una historia sobre un hombre que decide casarse con su vecina y lo comunica a su familia durante la cena. El padre, la madre, el tío, la tía e incluso un hermano pequeño hacen notar los defectos de la mujer y señalan que sería un error tal matrimonio. Finalmente alguien pregunta: ¿Por qué la elegiste? El hombre contesta: Porque no tiene familia. ¡BAM! ¿Somos parte del problema o somos parte de la solución? Ganar dinero está bien, ser feliz es mejor. No te pierdas esta película. (Ab.)

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