It Ends with Us - Justin Baldoni (2024)
ROMPER EL CIRCULO, en HBO Max, es el largo, aburrido y torpe producto de la cruza de Mujer: Casos de la vida real con Los ricos también lloran. Un mujer de 35, Lily, viaja a su pueblo para el sepelio de su padre y como novia fugitiva sale del funeral para volver a Boston, colarse a un edificio, sentarse en la azotea y pensar en el negocio de flores que abrirá con la herencia. ¿Qué hacía antes? ¿Dónde vivía? No importa. Lo que debes saber es que odiaba a su padre porque golpeaba a su madre y que tuvo sexo con Atlas, un sin techo, cuando asistía a la preparatoria. Estando en esa azotea, perdón, roof garden, llega un idiota pateando sillas y haciendo berrinche. Ella lo ve, él la ve, se miran, se gustan y comienzan a platicar. Ryle dice ser neurocirujano, ella no le cree y yo tampoco. Nunca lo verás trabajando en un hospital, ni estudiando ni cuidar sus manos como uno de esos médicos maniáticos. Una llamada interrumpe el cachondeo y él se va. Lily monta su florería y de la nada entra Allysa, la clásica loquita del barrio que la interroga y se hace la simpática. Lily la contrata y resulta ser hermana del señor que dijo ser neurocirujano.
La trampa está cerrada, Lily y Ryle se harán novios, serán felices y se casarán. Pero el karma es cabrón y Lily, que tiene mucho miedo de convertirse en una mujer golpeada como su madre, manifiesta que Ryle sea violento y la golpeé.
Ryle es un hombre celoso que en años sólo perdió el control en 2 o 4 ocasiones, según quien cuente la historia. 1) Cuando se quema la mano sacando algo del horno y golpea por accidente a Lily (ella después recuerda que le dieron un revés); 2) cuando encuentra a Lily encerrada con Atlas en el baño de un restaurante y el ex lo ataca, ellos se jalonean pero Lily no recibe golpes; 3) cuando descubre una tarjeta con el número de Atlas escondida en la funda del celular de Lily y ella lo persigue hasta las escaleras donde ella cae por un empujón; 4) la real, la de verdad, la única objetiva, después de descubrir las mentiras de Lily intenta arrancarle un tatuaje de una mordida.
Lily es incapaz de hablar para aclarar las cosas o sugerirle ir a terapia. No piensa en arreglar las cosas, tampoco considera presentarle a Atlas y que se hagan amigos. Jamás decide si quiere continuar su relación con Ryle o volver con Atlas, el drama es lo suyo. Prefiere confesar que no sabe si todavía ama a Atlas. Es cierto que Ryle la muerde, pero ella nunca acepta responsabilidad por sus actos.
Ella es tonta, malintencionada y se ríe como pendeja toda la película. Ellos son un par de idiotas peleando por una loca conflictiva. Quizá esto sea una historia real, lo dudo; pero estoy seguro de que es aburrida. Desde el título la cinta manifiesta su afán por educar a la audiencia. Pero no hay un sólo personaje con inteligencia emocional para tomar decisiones que acaben el conflicto. Al menos la protagonista debería tener un patrón de conducta congruente. Pero la congruencia no vive en esta cinta.
Ryle no es un violento cabrón, debió enloquecer cuando Lily pasa la noche con Atlas, pero ni un grito suelta. Lily jamás habla y cuando tiene a la bebé en los brazos, la usa como escudo. Eso es poner en peligro al bebé. A un tipo violento no le importa dónde está ni con quién. Si Ryle no tuviera remedio, la mata allí o dos días más tarde.
El cursi final en que debemos entender que ella, totalmente ajena a su comportamiento irresponsable, se siente heroína y dice que hasta aquí llegaron las mujeres golpeadas es una estupidez. Resulta evidente que la vida de Ryle y Lily está atada de por vida por la hija en común. Yo veo más violencia en el camino. Lo lógico hubiera sido abortar el hijo del hombre que te golpea y mudarte de ciudad. Pero, esto es para niñas ricas que se creen feministas y no ejercen la autocrítica. (Ab.)
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Gracias. No la veré
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