The Gambler - Rupert Wyatt (2014)


 EL APOSTADOR, en Netflix, es una comedia romántica con un peculiar camino del héroe. Lo que hace que se mueva esta historia es la apuesta, lo que la resuelve es el amor. Obviamente hay deudas que parecen impagables, pero la apuesta, en realidad, es otra. La cinta es anti sistema y si estás totalmente hipnotizado te parecerá basura. El protagonista, Jim Bennett (Mark Wahlberg) es una profesor de literatura, hijo de una familia adinerada. Tiene todo lo que el dinero pueda comprar y no está satisfecho. La muerte de su abuelo, que no le hereda nada, detona una crisis. Apostar la vida por un sueldo de profesor no es una apuesta atractiva. Educar es una tarea preconcebida. La gente espera que un profesor siempre haga lo mismo: Pararse al frente del aula a platicar. Eso funciona en primaria y secundaria, pero se hace lo mismo en preparatoria, universidad y posgrado. La libertad de cátedra, en la práctica, se limita a abordar el tema a tu modo. Tienes una hora y tu trabajo es hablar. 
Hay idiotas que todavía esperan tomar dictado y memorizar. Un profesor se siente obligado a pasar su conocimiento y el mundo tiene una idea clara de cómo debería hacerlo.

Jim habla poco de literatura y se dirige a sus alumnos con sinceridad, por ello es calificado como un mal profesor. Jim explica que el talento es caprichoso, no lo tienen todos, se adhiere a muy pocos sin un patrón específico. Sólo uno de todos sus estudiantes tiene la chispa. Pone por ejemplo a Dexter, un tenista, en teoría es el segundo mejor del país, que un día cualquiera descubrió que era naturalmente bueno y por eso tomó interés en el deporte. Entre sus alumnos también está Lamar, un jugador estrella de basquetbol que vive metido en su celular. Pero la que interesa es Amy, la Capitana Marvel (Brie Larson), la que el talento para escribir.  

No te preocupes por la incorrección política de que un profesor se involucre con una alumna. Amy, es un chica normal, centrada, sin pose de intelectual de izquierda, mesera en un casino, hija de madre alcohólica, que no se piensa feminista ni tiene arañas en la cabeza. Ella disfruta de estar con Jim, pero tampoco es un pegoste.

La historia muestra que Jim es amenazado de muerte, le dan una semana para pagar sus deudas. Recibe dinero de su madre y decide perderlo. De nada sirve que su madre le compre la vida. Recibir el dinero, le facilita distanciarse de su madre. Amy lo acompaña a apostar y no lo juzga cuando lo pierde. Jim necesita encontrar su propósito. La semana es una búsqueda de sí mismo. El tipo pierde su automóvil, un BMW que le dicen es la gran cosa. Intenta vender su reloj y al no recibir lo que pide, termina por regalarlo. Lo golpean, lo asedian. El tipo pierde todo, menos sus contactos. 

Reducido al vació, con la presión de una gran deuda y la amenaza de perder la vida, nada ha cambiado pero el tiempo se agota. La inspiración revienta cuando le dicen que si no paga matarán a Amy. Arma un plan y con ayuda de sus alumnos lo lleva a cabo. Jim no es lo que su familia y sus alumnos esperan de él. Jim no es su coche, su reloj o su puesto como profesor, fue un escritor pero ya no lo es, fue un apostador, pero ya no lo es. Tocó fondo. Es en el vacío donde puede conocerse. Ahora busca a Amy porque sin tener nada, es libre y está motivado. (Ab.) 

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