Horizon: An American Saga - Chapter 1 - Kevin Costner (2024)

Horizonte: Una Leyenda Americana está en MAX. Esta es apenas la primera parte de cuatro, pero la historia no depende de los protagonistas. El personaje central es la tierra, así que saltamos entre los distintos tipos de humanos que se movían por el Viejo Oeste consolidando la nueva idea de nación que se extendía después de la Guerra Civil Norteamericana. Entre tal caos, los personajes son relativamente desechables, mientras los paisajes son importantes porque recuerdan que los humanos dependemos de la Tierra. Somos muy pequeños comparados con ella. Sin embargo, tenemos la convicción de que podemos poseerla. En este filme resulta muy evidente que la Tierra no tiene dueño. Los nativos americanos son desplazados pero luchan por conservar sus territorios, la guerra con ellos en realidad es una guerra racial. Los inmigrantes no reconocen ningún derecho a los nativos. Además hay alguien o algunos que se aprovecha de las ilusiones ajenas para vender terrenos que nunca fueron suyos. Resulta lógico que esta cinta moleste a mucha gente. La claridad de su exposición respecto de la propiedad de la tierra remueve heridas porque obliga a pensar en la legitimidad y la fuerza.

Supongo que Kevin Costner lo hace con buena intención, pero la historia permite todo tipo de interpretaciones y la ambigüedad, por realista que sea, nunca ha sido el sello de Hollywood. La ruptura con la venta de ilusiones y buena voluntad es evidente.

La película se siente grande a pesar de estar inconclusa. La vida nunca para, avanza sin brindar espacios para los lamentos. La vida es. El vivo al gozo y el muerto al pozo. Kevin desaparece la autocompasón y te invita a pelear por los que deseas. La naturaleza no se tienta el corazón al ver tus lágrimas.

La filosofía que recorre la serie Yellowstone regresa recargada. Estás aquí ahora. ¿Vas a hacer algo o te vas a morir? Si te quieres morir, el mundo encontrará la manera de ayudarte a cumplir tu deseo. Si vas a hacer algo, necesitas empezar ya. Este filme es terapia de choque naturalista. Un gozo infinito que pisa callos. Ya quiero ver las partes que faltan de esta historia. La civilización y la ciudad nos están matando y Costner no tiene pelos en la lengua. (Ab.)

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