Apocalypse Now Redux - Francis Ford Coppola (1979)

Este es uno de esos filmes cuya leyenda es grande pero que no son placenteros de ver. El ritmo super lento y el viaje por el río parece interminable. La duración de tres horas y veintidós minutos de la versión de Netflix requiere paciencia. El filme parece tratar sobre Vietnam, pero no es lo único que trata. Es una adaptación de la novela de Joseph Conrad, Heart of Darkness. La cinta comienza con Benjamin Willard, interpretado por Martin Sheen, aburrido en su cuarto de hotel diciendo que no sabe ni dónde está. Llegan a darle una misión y tienen que bañarlo para ponerlo presentable. Lo llevan con sus superiores y le dan la misión de matar a un soldado americano, el coronel Kurtz, que ya no sigue ordenes y que ha hecho un ejercito propio con los lugareños. Seguiremos a Willard en su camino por el río y cada parada será más peligrosa y alocada. La Tierra, la naturaleza, es enemiga de los invasores americanos.

Sólo recordaba la frase "Amo el olor a Napalm por la mañana" en boca de Robert Duvall, pero esa frase eso no es lo más gracioso, ni lo más trágico ni lo más interesante. Apenas es la punta del iceberg de la locura de la guerra. Quizá lo más divertido es la necedad de surfear o el mensaje pidiendo que la tabla de sus sea devuelta.

Sin embargo, la película obliga a pensar. Alguien grita mata a esos salvajes y lo que sucede es que los soldados americanos que viajaron a otro continente, disparan contra desconocidos. Ellos dicen que los otros son salvajes y eso implica que ellos no lo son. Y a pesar de todo, Willard, un civilizado, tiene la misión de matar a otro civilizado que ha hecho de un ejército de incivilizados.

Las contradicciones son tantas y están expuestas de tal manera, que imaginaba un final en el que Willard y Kurtz unían fuerzas. La versión que ví no termina así, o quizá no explícitamente. Pero Willard termina admirando a Kurtz y cumpliendo su voluntad hasta cierto punto.

La secuencia con los franceses es un respiro. La de las playmates una locura. La del tigre es pura poesía. El viaje se convierte en un sueño, la vida es absurda, el sinsentido se puede tocar. Kurtz, Marlon Brando, es un poeta, un sacerdote, un rey, un iluminado, un padre. En el filme aparece el libro La Rama Dorada de James Frazer, por lo que puede entenderse que Kurtz es el rey del bosque que será sacrificado. 

Todo tipo de mitos cuadran en este escenario surrealista. Buda puede ser una representación solar. Kurtz puede ser el Dios padre. Willard puede ser el elegido. Quizá los sacrificios humanos siguen siendo necesarios en el inconsciente colectivo. El único modo de saber qué significa es verla. Quizá el filme es un presagio de la extinción humana. De cualquier modo es una experiencia abrumadora, la música de The Doors que abre y cierra el filme, pasando por la cantidad de helicópteros hasta el sacrificio final. Date la oportunidad de verla y saca tus conclusiones. (Ab.)

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