Morning Glory - Roger Michell (2010)

UN DESPERTAR GLORIOSO, en Netflix, muestra a la mítica Regina George (Rachel Mc Adams) esforzándose al máximo para mostrar que por mucho que ames tu trabajo, tu trabajo no está obligado a amarte. Rachel es Becky, una adicta al trabajo, joven y bella productora de TV a la que susurran el chisme de que será ascendida. Como suele suceder, el chisme es para que acudas, flojito y cooperando, a ese dulce momento en que te notifican que acabas de ingresar al universo del desempleo. ¡BOOM! Todos hemos pasado por esto. El futuro se convierte en una nube gris en la que no es posible ver más allá de tus narices. Pero Becky es talentosa y vigorosa, no se detiene, llama a todo el mundo y se declara capaz, competente y animada para trabajar. Consigue una cita en una compañía de TV y el entrevistador la hace pedazos. Pero, tras dejarla ir, quizá porque la ve en plan de aceptar lo que sea, le ofrece que produzca un equivalente al matutino HOY. Ella lo toma sin saber lo que le espera. 

El programa, como HOY, es basura. Además es basura que nadie está interesado en ver. En el segmento de la porquería matutina son el último eslabón. Becky intenta poner orden mientras se enamora de un compañero de trabajo y lidia con los egos de su equipo.


El desenlace es evidente. Sólo sirve para que disfrutes de ver a Becky haciendo malabares mientras encuentra el camino para que su programa no sea cancelado. Ya que Diane Keaton y Harrison Ford están involucrados, resulta obvio que lo logrará. No se complica, el hilo lleva al éxito. Pero el éxito no se siente sólido. La gracia de la cinta radica en ver a Rachel sudar, desesperar y enloquecer.

La cinta aprovecha el lazo emocional que sentimos los que hemos tenido la oportunidad de trabajar y formar parte de un equipo exitoso. El mensaje está muy escondido. Mike Pomeroy (Mr.Ford) que fue un grande entre los grandes es incapaz de soltar su pasado. Necesita ser llevado al límite antes de entender que el cambio es la constante y debería adaptarse. Es decir, podría conservar su actitud odiosa, pero el universo no está conspirando para conceder caprichos. 

El viaje de pareja dispareja es múltiple. Por una parte hay contraste entre Rachel y Harrison, pero también hay un contraste entre Diane y Harrison así como entre John Pankow y Diane. Colleen Peck (Miss Keaton) sabe que ella es la constante del programa, productores van y vienen, reporteros y copresentadores también. Pero ella es el alma del programa. Su contraparte está detrás de cámaras. Lenny, el gordo y calvo asistente de Becky, interpretado por el genial Mr. Pankow, que ha estado en el programa desde siempre y se sabe todos los chismes. Él se roba la escena cada vez que aparece. 

El Ying y el Yang es multidimensional. Lo masculino y lo femenino, lo viejo y lo nuevo, delante y detrás de cámaras, lo simple y lo complicado. Todo convive. El show debe continuar y hay que darle a la gente algo que mejore su día. Aunque sea una tonta receta de huevos revueltos preparada por una vaca sagrada de las noticias. Hay espacio para todo. La historia se sostiene gracias a su elenco de primera y el tejido fino de la relación entre ellos. No aprenderás a producir TV, pero puedes aprender que la chamba no es sólo entregar un producto, el 70% del trabajo consiste en construir confianza entre tus compañeros. (Ab.)

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