Scream fue un trancazo en el año de su estreno. Todo el mundo la vió y gracias a eso hicieron la 2, la 3 y la 4 y dicen que habrá 5. No sólo eso, también inspiró Scary Movie (2000) que también tuvo secuelas. Yo ví Scream en el cine y recuerdo no haber podido deducir la vuelta de tuerca final y salir muy satisfecho y feliz. Lo que más recuerdo fue la sensación de asombro que me provocó escuchar el análisis de las reglas de las películas de asesinos seriales (slashers) en boca de un personaje. Creo que gracias a esta cinta descubrí que el cine podía hablar de cine, incluir referencias directas y copiar sin caer en el plagio. Aunque ya era un adicto al cine, mi capacidad de apreciar los detalles de una buena película creció gracias a Scream. Nada de eso es importante para ustedes pero brinda contexto. La cinta comienza de manera lúdica. Presenta el primer asesinato en abierta contradicción de las leyes no escritas de las películas de terror. Es decir, muere la rubia guapa que generalmente se salva. Aunque esa escena es muy divertida y permite el detalle nostálgico de ver a Drew Barrymore cuando era bonita y no tenía cirugía, no viene al caso y es un error grave de la trama, ya que ese asesinato no se conecta con la historia central. Se trata de un prólogo incoherente pero entretenido.
La historia principal cuenta que hace un año mataron a una mujer y, para festejar el aniversario, el asesino desea matar a la hija de aquella mujer. El móvil es la venganza pero eso tarda mucho en descubrirse. Además hay un hombre en prisión esperando por la muerte y una molesta reportera desesperada por hacerse famosa. Detalles que no son relevantes pero que visten la realidad del pueblito. Lo interesante es ver a la protagonista, Sidney Prescott, escapar una y otra vez del asesino. La actriz Neve Campbell no es la clásica tontita, es una mujer que luce sana, joven (no de high school) y en buena condición física. Además le adornan el rostro unas hermosas pecas. Ella mantiene una actitud positiva y vencerá a su agresor sólo al final.
Lo sabroso del filme está en el sentido del humor y en las reglas que rompe. Por ejemplo: Freddy Krugger aparece como conserje y la protagonista dice
Not in my movie! Quizá hoy no sean tan claras las reglas de las películas de asesinos. Pero en los noventas, estaban escritas en piedra y se cumplían en cada cinta. Además aparecen Courtney Cox, que tenía gran éxito como Monica en la serie
Friends, y Rose McGowan que no recuerdo de donde salió pero que tenía una muerte divertida. Ellas ponen el toque sexy sin hacer desnudos.
Quizá esta cinta fue también de las primeras en inyectar el veneno de la corrección política, pero de cualquier modo su trascendencia es innegable. La máscara usada por el asesino fue indispensable en las fiestas de Halloween por años.
La cinta mantiene buen ritmo e intenta ser realista. Aunque ninguna cinta puede serlo cuando se trata de matar gente. Siempre está el cliché de explicar el asunto en vez de cerrar el trato. ¿Porque acuchillarse antes de haber matado a la presa? ¿Por qué el papá se queda quieto sin hacer nada? En fin. Tiene fallas, pero teje un cuento con sentido que entretiene y divierte. Ya quisieran los Derbez hacer algo así de bueno. (Ab.)
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