Dhoom Dhaam - Rishab Seth (2025)

 En Netflix apareció esta comedia romántica que cae en las bobadas, me agarró en mis 5 minutos. Quizá mi buena fe para esta cinta se deba a que siempre he sentido curiosidad por ese país y sus tradiciones. Además, nada hay más ridículo que las bodas. En ellas, los humanos se empeñan en demostrar cuan especiales son bajo el pretexto de compartir su felicidad. Lo raro es que esas demostraciones cumplen necesariamente con ciertos pasos que todas tienen. Sólo en escasas ocasiones, los casados se atreven a romper con las expectativas sociales y arman una fiesta diferente. Quizá por eso siento respeto por los que huyen a Las Vegas y no invitan a nadie. Yo siempre soñé con casarme en una cascada y luego dejé de pensar en eso. En mi opinión las mejores bodas son las que rompen con lo establecido. Así que claro que necesitaba ver cómo es una boda en la India, por más occidentalizada que sea. Y la cinta, aunque no muestra mucho de la ceremonia, si muestra toda la hipocresía que rodea a un matrimonio. Muestra los secretos, las mentiras, las traiciones y las tontas expectativas. Y lo hace con intención, por eso, aunque el humor tiene momentos realmente predecibles y sosos, la cinta se sostiene.

Todas las tonterías tienen como finalidad que los recién casados se conozcan. A la boda se suman los festejos de año nuevo, cosa que nunca he visto en México y me parece que es una fecha ideal. Si vas a la boda ya tienes pretexto para no ir con tus suegros. 

Por otra parte, la cinta le invierte. Es decir, la música es genial, el paseo por la ciudad va de lo lujoso a lo sucio y las escenas de acción incluyen persecución en autos y pelea en una obra gris, sin ocultar que la policía, como en todo el mundo, está infestada de criminales. Tener la oportunidad de ver lo que hacen otros países ayuda a poner en contexto lo que hacen los gringos. Aunque Bollywood sea una industria, sigue teniendo detalles que pueden ser errores o concesiones para su público objetivo.

La película toma inspiración de cintas como Forces of Nature (1999) y Date Night (2010) y aunque le falta ritmo, funciona si apagas el cerebro. Yo sinceramente me divertí y agradecí que la mujer fuera la que sabe conducir auto y moto. Además es refrescante que la música no incluya rap ni reggaetón. (Ab.)

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