Acts of Vengeance - Isaac Florentine (2017)

Actos de venganza es un filme tan malo que da risa. Si te animas, puedes verlo en Netflix. Ya el título presagia una cinta hecha para pasar el rato. Antonio Banderas interpreta a Frank Valera, un superabogado penalista que vive de su enorme capacidad para hablar. Cursimente declara: de las miles de palabras que utilizo a diario sólo tres importan: I LOVE YOU. Palabras que reserva para su esposa e hija.

La película recurre al cliché de la función escolar de talento. La niña canta la canción que la une a su padre y se siente decepcionada de hacerlo sólo frente a su madre. Mr. Valera se atora en la oficina y llega cuando hija y madre han abandonado el teatro. El abogado vuelve a casa con la cola entre las patas y una disculpa disfrazada de oso de peluche en cuyo pecho se lee: I'M SORRY.

¿Ya te aburriste? Aguanta. Literalmente, las manecillas del reloj avanzan sin noticias. Horas más tarde la policía avisa a Frank que sus mujeres han sido asesinadas. Cargado de culpa y con el corazón roto, decide dedicarse a la bebida y a las peleas clandestinas. ¿Cuantas películas has visto cómo esta?

Después de ser vencido una y mil veces, sin perder los dientes ni ganar cicatrices, decide entrenar. Obviamente se convertirá en un peleador temible casi invencible, que ayudado por las "Meditaciones" de Marco Aurelio y convertido al estoicismo buscará venganza. En su búsqueda de justicia será ayudado por un perro y por Paz Vega que luce flaca y desangelada. ¿Donde quedó la protagonista de Lucía y el sexo (2001)?

¿Quieres que te cuente el final o ya lo imaginaste? Por supuesto encontrará al culpable, descubrirá la razón detrás de los asesinatos y castigará al malvado.

La batalla final es tan extraña que Banderas luce como una hormiga intentando ahorcar a un elefante. Es tan mala que divierte. Quedan advertidos. (Ab.)